1. Del maestro de coro. De los hijos de Coré. Salmo.

2. Aplaudan, todos los pueblos, aclamen al Señor con gritos de alegría;

3. porque el Señor, el Altísimo, es temible, es el soberano de toda la tierra.

4. Él puso a los pueblos bajo nuestro yugo, y a las naciones bajo nuestros pies;

5. él eligió para nosotros una herencia, que es el orgullo de Jacob, su predilecto. Pausa

6. El Señor asciende entre aclamaciones, asciende al sonido de trompetas.

7. Canten, canten a nuestro Dios, canten, canten a nuestro Rey:

8. el Señor es el Rey de toda la tierra, cántenle un hermoso himno.

9. El Señor reina sobre las naciones el Señor se sienta en su trono sagrado.

10. Los nobles de los pueblos se reúnen con el pueblo del Dios de Abraham: del Señor son los poderosos de la tierra, y él se ha elevado inmensamente.





“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina