Gefunden 60 Ergebnisse für: servir
Yo mismo escogí a sus hermanos los Levitas de en medio de los israelitas para dárselos. Son donados de Dios para servir en la Tienda de las Citas. Tú, y tus hijos contigo, desempeñarán su ministerio en todo lo que se refiere al altar y a lo que pasa detrás de la cortina. Ustedes asegurarán su servicio y ese sacerdocio es un don que les hago; el extraño que quisiere meterse en eso, morirá". (Números 18, 6)
Allí tendrán que servir a dioses fabricados, que no son más que madera y piedra, que ni ven, ni oyen, ni comen, ni sienten. (Deuteronomio 4, 28)
Si tu hermano, hijo de tu padre, si tu hijo o tu hija, o la mujer que descansa en tu regazo o el amigo a quien amas tanto como a ti mismo, trata de seducirte en secreto, diciéndote: «Vamos a servir a otros dioses», dioses que no conociste ni tú ni tus padres, (Deuteronomio 13, 7)
«Allí se han manifestado unos desgraciados, y han pervertido a sus conciudadanos, invitándolos a servir a dioses extranjeros que no son nada para ustedes», (Deuteronomio 13, 14)
si van a servir a otros dioses y se postran ante ellos, sean el sol, o la luna, o las estrellas del cielo, respecto a los cuales no te di ningún mandato, (Deuteronomio 17, 3)
Ojalá no haya, pues, entre ustedes hombre o mujer, familia o tribu, cuyo corazón se aparte hoy de Yavé para ir a servir a los dioses de esas naciones. Ojalá no broten entre ustedes plantas venenosas y amargas. (Deuteronomio 29, 17)
porque se han ido a servir a otros dioses y los han adorado, dioses que no eran suyos y a quienes Yavé no había encargado. (Deuteronomio 29, 25)
Que si no quieren servir a Yavé, digan hoy mismo a quiénes servirán, si a los dioses que sus padres sirvieron en Mesopotamia, o a los dioses de los amorreos que ocupaban el país en que ahora viven ustedes. Por mi parte, yo y los míos serviremos a Yavé.» (Josué 24, 15)
El pueblo respondió: «¡No quiera Dios que abandonemos a Yavé para servir a otros dioses! (Josué 24, 16)
Josué contestó al pueblo: «¿Serán ustedes capaces de servir a Yavé? Pues él es un Dios Santo, un Dios Celoso, que no soportará maldades ni faltas. (Josué 24, 19)
Al ver Yavé que lo abandonaban para servir a Baal y a Astarté, se enojó contra su pueblo, entregándolo en manos de saqueadores, que los dejaron en la miseria. (Jueces 2, 13)
En esos años los israelitas clamaron a Yavé, diciendo: «Hemos pecado contra ti porque hemos abandonado a Yavé, nuestro Dios, para servir a los Baales.» (Jueces 10, 10)