Fundar 180 Resultados para: trono
El castigo de estos crímenes caerá sobre Joab y su descendencia para siempre, mientras que David y su descendencia, su familia y su trono tendrán paz para siempre de parte de Yavé.» (1 Reyes 2, 33)
En cambio el rey Salomón será bendito y el trono de David permanecerá ante Yavé para siempre.» (1 Reyes 2, 45)
Salomón respondió: «Tú has tenido gran amor a David, mi padre, ya que él te servía fielmente, como es debido y con sinceridad. También le has hecho un favor muy grande permitiendo que un hijo suyo le sucediera en el trono. (1 Reyes 3, 6)
Ahora quiero edificar una Casa al Nombre de Yavé, mi Dios, según lo que Yavé dijo a mi padre: El hijo tuyo, que yo pondré en tu lugar sobre tu trono, me edificará una Casa. (1 Reyes 5, 5)
Había también un Salón del Trono, donde Salomón administraba la justicia, y que se llamaba Salón del Juicio, cubierto de cedro desde un extremo hasta el otro. (1 Reyes 7, 7)
Yavé ha cumplido su palabra; he sucedido a mi padre David y me he sentado en el trono de Israel, como él lo había prometido, y he construido esta Casa para el Nombre de Yavé. (1 Reyes 8, 20)
afirmaré para siempre tu trono sobre Israel, como prometí a David, tu padre, cuando le dije: "No faltará un hombre de tu descendencia sobre el trono de Israel." (1 Reyes 9, 5)
Bendito sea Yavé, tu Dios, que te ha favorecido y te ha puesto en el trono de Israel. Yavé es quien, en su inmenso amor por este pueblo, te ha puesto como rey para que lo guíes con rectitud y justicia.» (1 Reyes 10, 9)
Hizo también un gran trono de marfil y lo revistió de oro finísimo. (1 Reyes 10, 18)
El trono tenía seis gradas y detrás del trono había un respaldo curvado. Había dos brazos y dos leones de pie junto a los brazos, (1 Reyes 10, 19)
Al tomar el poder, apenas se hubo sentado en el trono, mató a toda la familia de Basá, sin dejar ningún hijo, pariente, ni amigo. (1 Reyes 16, 11)
El rey de Israel y Josafat, rey de Judá, estaban sentados cada uno en su trono, vestidos de gala ante la puerta de Samaria, y todos los profetas estaban en trance delante de ellos. (1 Reyes 22, 10)