Löydetty 395 Tulokset: obras de arte en bronce
Porque así como un cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe que no produce obras está muerta. (Carta de Santiago 2, 26)
En cambio la sabiduría que viene de arriba es, ante todo, recta y pacífica, capaz de comprender a los demás y de aceptarlos; está llena de indulgencia y produce buenas obras, (Carta de Santiago 3, 17)
El Padre que invocan no hace diferencias entre personas, sino que juzga a cada uno según sus obras; tomen, pues, en serio estos años en que viven fuera de la patria. (1º Carta de Pedro 1, 17)
Lleven una vida ejemplar en medio de los que no conocen a Dios; de este modo, esos mismos que los calumnian y los tratan de malhechores, notarán sus buenas obras y darán gloria a Dios el día en que los visite. (1º Carta de Pedro 2, 12)
En cambio quienes pecan son del Diablo, pues el Diablo peca desde el principio. Para esto se ha manifestado el Hijo de Dios: para deshacer las obras del Diablo. (1º Carta de Juan 3, 8)
pues el que le saluda se hace cómplice de sus malas obras. (2º Carta de Juan 1, 11)
Hermano, obras muy bien al preocuparte por los hermanos, y más aún cuando llegan de otro lugar. (3º Carta de Juan 1, 5)
para juzgarlos a todos y pedir cuentas a los impíos por todas las obras malas que cometieron: castigará todas las palabras injuriosas que los impíos pecadores lanzaron contra él. (Carta de Judas 1, 15)
sus pies son como bronce pulido acrisolado en el horno; su voz resuena como estruendo de grandes olas. (Apocalipsis 1, 15)
Conozco tus obras, tus dificultades y tu perseverancia. Sé que no puedes tolerar a los malos y que pusiste a prueba a los que se llaman a sí mismos apóstoles y los hallaste mentirosos. (Apocalipsis 2, 2)
Escribe al ángel de la Iglesia de Tiatira: Así habla el Hijo de Dios, cuyos ojos son como llama de fuego y cuyos pies parecen de bronce brillante: (Apocalipsis 2, 18)
Conozco tu proceder, tu amor, tu fe, tu servicio, tu perseverancia y tus últimas obras más numerosas que las primeras. (Apocalipsis 2, 19)