Löydetty 35 Tulokset: huérfano
No vejarás a viuda ni a huérfano. (Exodo 22, 21)
que hace justicia al huérfano y a la viuda, y ama al forastero, a quien da pan y vestido. (Deuteronomio 10, 18)
Vendrán así el levita - ya que él no tiene parte ni heredad contigo - el forastero, el huérfano y la viuda que viven en tus ciudades, y comerán hasta hartarse. Y Yahveh tu Dios te bendecirá en todas las obras que emprendas. (Deuteronomio 14, 29)
En presencia de Yahveh tu Dios te regocijarás, en el lugar elegido por Yahveh tu Dios para morada de su nombre: tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita que vive en tus ciudades, el forastero, el huérfano y la viuda que viven en medio de ti. (Deuteronomio 16, 11)
Durante tu fiesta te regocijarás, tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita, el forastero, el huérfano y la viuda que viven en tus ciudades. (Deuteronomio 16, 14)
No torcerás el derecho del forastero ni del huérfano, ni tomarás en prenda el vestido de la viuda. (Deuteronomio 24, 17)
Cuando siegues la mies en tu campo, si dejas en él olvidada una gavilla, no volverás a buscarla. Será para el forastero, el huérfano y la viuda, a fin de que Yahveh tu Dios te bendiga en todas tus obras. (Deuteronomio 24, 19)
Cuando varees tus olivos, no harás rebusco. Lo que quede será para el forastero, el huérfano y la viuda. (Deuteronomio 24, 20)
Cuando vendimies tu viña, no harás rebusco. Lo que quede será para el forastero, el huérfano y la viuda. (Deuteronomio 24, 21)
El tercer año, el año del diezmo, cuando hayas acabado de apartar el diezmo de toda tu cosecha y se lo hayas dado al levita, al forastero, a la viuda y al huérfano, para que coman de ello en tus ciudades hasta saciarse, (Deuteronomio 26, 12)
dirás en presencia de Yahveh tu Dios: «He retirado de mi casa lo que era sagrado; se lo he dado al levita, al forastero, al huérfano y a la viuda, según todos los mandamientos que me has dado sin traspasar ninguno de tus mandamientos ni olvidarlos. (Deuteronomio 26, 13)
Maldito quien tuerza el derecho del forastero, el huérfano o la viuda. - Y todo el pueblo dirá: Amén. (Deuteronomio 27, 19)