Talált 103 Eredmények: buscar
Mandó buscar a Balaam, hijo de Ber, a Petor junto al río, en el territorio de los amonitas. Lo invitó a venir diciéndole: "Un pueblo que salió de Egipto acaba de extenderse por toda la región y se estableció frente a mí. (Números 22, 5)
De mañana Balac vino a buscar a Balaam e hizo que subiera a Bamot-Baal, porque desde allí podía ver una parte del pueblo. (Números 22, 41)
Ustedes irán a buscar a Yavé al lugar que él escoja entre todas las tribus para poner allí su Nombre y habitar en él. (Deuteronomio 12, 5)
Cuando vendimies tu viña, no volverás a buscar lo que haya quedado. Esto será la parte del forastero, del huérfano y de la viuda. (Deuteronomio 24, 21)
Balac, hijo de Sipor, rey de Moab, declaró la guerra a Israel y mandó a buscar a Balaam, hijo de Beor, para que les maldijera, (Josué 24, 9)
Los árboles se pusieron en camino para buscar un rey a quien ungir. Dijeron al olivo: «Sé tú nuestro rey.» (Jueces 9, 8)
Los dirigentes de Galaad, pues, fueron a buscar a Jefté al país de Tob (Jueces 11, 5)
Luego de un rudo combate, los israelitas fueron derrotados, dejando muertos en el campo de batalla alrededor de cuatro mil hombres. Volvió el ejército al campamento, y los jefes de Israel se preguntaban por qué Yavé había dejado que fueran derrotados por los filisteos. Y se dijeron: «Vamos a Silo a buscar el Arca de nuestro Dios. Así estará ella con nosotros y nos salvará de nuestros enemigos.» (1 Samuel 4, 3)
Cuando Saúl subía con su muchacho por la cuesta de la ciudad de Ramá, encontraron a unas muchachas que salían a buscar agua y les preguntaron: «¿Está aquí el vidente?» ( (1 Samuel 9, 11)
Mandó Jesé a buscar a su hijo menor. Era rubio, tenía lindos ojos y buena presencia. Y Yavé dijo: «Levántate y conságralo con aceite, porque es éste.» (1 Samuel 16, 12)
Luego mandaré a mi muchacho a buscarlas diciéndole: Anda a buscar la flecha. Si digo al joven: La flecha está más acá, tómala; entonces, vienes tú, ya que es señal de que no hay nada que temer y, ¡vive Yavé!, que estás seguro. (1 Samuel 20, 21)
Como dice el antiguo proverbio: De los malos sale la malicia, por eso mi mano no te tocará. ¿A quién has salido a buscar, rey de Israel? (1 Samuel 24, 13)