Talált 154 Eredmények: moab
Los moabitas dijeron entonces a los ancianos de Madián: "¡Esa muchedumbre va a devorar toda la región, como el buey se come la hierba del campo!" En ese entonces era rey de Moab Balac, hijo de Sipor. (Números 22, 4)
Los ancianos de Moab partieron pues junto con los de Madián, con las manos llenas de regalos para el adivino, y llegaron a la casa de Balaam. Cuando le transmitieron las palabras de Balac, (Números 22, 7)
Balaam les dijo: "Alójense en mi casa por esta noche, y les responderé según lo que me diga Yavé". Los jefes de Moab se quedaron pues en casa de Balaam. (Números 22, 8)
Balaam le respondió a Dios: "Balac, hijo de Sipor, rey de Moab, me manda este recado: (Números 22, 10)
Se levantaron entonces los jefes de Moab y retornaron donde Balac: "Balaam, dijeron, se niega a venir con nosotros." (Números 22, 14)
Balaam se levantó muy de mañana, ensilló su burra y se fue con los jefes de Moab. (Números 22, 21)
Cuando Balac supo que venía Balaam, salió a su encuentro en Ar-Moab, en la frontera del Arnón en los límites de su territorio. (Números 22, 36)
Volvió pues donde Balac que seguía de pie junto a su holocausto con todos los jefes de Moab. (Números 23, 6)
Y Balaam proclamó su poema: "De Aram me dice que venga Balac, de los montes del oriente me llama el rey de Moab: "¡Ven y maldíce a Jacob! ¡ven y amenaza a Israel!" (Números 23, 7)
Balaam volvió entonces donde aquél, que seguía de pie al lado de su holocausto con los jefes de Moab. Balac le preguntó a Balaam: "¿Qué dijo Yavé?" Y Balaam proclamó su poema: "¡Levántate Balac, escucha! ¡Pon atención, hijo de Sipor! (Números 23, 17)
Lo veo; pero no por ahora, lo contemplo, pero no de cerca: un astro se levantaa desde Jacob, un cetro se yergue en Israel. Le pega a Moab en las sienes, y en el cráneo a todos los hijos de Set. (Números 24, 17)
Israel se instaló en Sitim y el pueblo se entregó a la prostitución con las hijas de Moab. (Números 25, 1)