Talált 18 Eredmények: crimen

  • ‘Díganle a José: Perdona el crimen y el pecado de tus hermanos, que te hicieron tanto mal. Por eso, perdona el crimen de los servidores del Dios de tu padre’". Al oír estas palabras, José se puso a llorar. (Génesis 50, 17)

  • No basta un solo testigo para declarar a un hombre culpable de crimen o delito; cualquiera sea la índole del delito, la sentencia deberá fundarse en la declaración de dos o más testigos. (Deuteronomio 19, 15)

  • Si un hombre, culpable de un crimen que merece la pena de muerte, es ejecutado y colgado de un árbol, (Deuteronomio 21, 22)

  • Así debía ser castigado el crimen cometido contra los setenta hijos de Ierubaal, y su sangre debía recaer sobre su hermano Abimélec, que los había matado, y sobre los señores de Siquém, que habían sido cómplices en la matanza de sus hermanos. (Jueces 9, 24)

  • Dios hizo recaer sobre Abimélec el crimen que había cometido contra su padre, cuando mató a sus setenta hermanos. (Jueces 9, 56)

  • Los benjaminitas, por su parte, oyeron que los israelitas habían subido a Mispá. Los israelitas dijeron: "Cuéntennos cómo ha sucedido el crimen". (Jueces 20, 3)

  • Las tribus de Israel enviaron emisarios a toda la tribu de Benjamín para decirle: "¿Qué explicación dan del crimen que se ha cometido entre ustedes? (Jueces 20, 12)

  • Como pecado de hechicería es la rebeldía; como crimen de idolatría es la contumacia. Porque tú has rechazado la palabra del Señor, él te ha rechazado a ti para que no seas rey". (I Samuel 15, 23)

  • ¿También de ustedes se oirá decir que cometen ese gran crimen de traicionar a nuestro Dios, casándose con mujeres extranjeras? (Nehemías 13, 27)

  • en su lecho, sólo piensa hacer el mal, se obstina en el camino del crimen y no reprueba al malvado. (Salmos 36, 5)

  • Algunos habitantes de Jope, por su parte, perpetraron un enorme crimen. En efecto, invitaron a los judíos que vivían con ellos a subir con sus mujeres e hijos a unas embarcaciones que habían equipado, disimulando las malas intenciones que tenían contra ellos. (II Macabeos 12, 3)

  • Es costumbre arrojar en ese lugar a los reos de robo sacrílego o de algún otro crimen enorme, a fin de hacerlos morir. (II Macabeos 13, 6)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina