Talált 67 Eredmények: duelo

  • El duelo de los hombres se dirige a sus cuerpos, pero el nombre de los pecadores, que no es bueno, se borrará. (Eclesiástico 41, 11)

  • En duelo se marchitó la tierra, se amustia, se marchita el orbe, el cielo con la tierra se marchita. (Isaías 24, 4)

  • La tierra está en duelo, languidece; el líbano está ajado y mustio. Ha quedado el Sarón como la estepa, se van pelando el Basán y el Carmelo. (Isaías 33, 9)

  • Alegraos, Jerusalén, y regocijaos por ella todos los que la amáis, llenaos de alegría por ella todos los que por ella hacíais duelo; (Isaías 66, 10)

  • - Hija de mi pueblo, cíñete de sayal y revuélcate en ceniza, haz por ti misma un duelo de hijo único, una endecha amarguísima, porque en seguida viene el saqueador sobre nosotros. (Jeremías 6, 26)

  • Sí, así dice Yahveh: No entres en casa de duelo, ni vayas a plañir, ni les consueles; pues he retirado mi paz de este pueblo - oráculo de Yahveh - la merced y la compasión. (Jeremías 16, 5)

  • Entonces se alegrará la doncella en el baile, los mozos y los viejos juntos, y cambiaré su duelo en recocijo, y les consolaré y alegraré de su tristeza; (Jeremías 31, 13)

  • Ha cesado la alegría de nuestro corazón, se ha trocado en duelo nuestra danza. (Lamentaciones 5, 15)

  • Con gozo los había yo criado, y los he despedido con lágrimas y duelo. (Baruc 4, 11)

  • Os despedí con duelo y lágrimas, pero Dios os devolverá a mí entre contento y regocijo para siempre. (Baruc 4, 23)

  • Yo le quitaré su alborozo de ciudad bien poblada y en duelo se trocará su orgullo. (Baruc 4, 34)

  • Jerusalén, quítate tu ropa de duelo y aflición, y vístete para siempre el esplendor de la gloria que viene de Dios. (Baruc 5, 1)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina