Talált 81 Eredmények: fariseos
Jesús les dijo: «Abrid los ojos y guardaos de la levadura de los fariseos y saduceos.» (Mateo 16, 6)
¿Cómo no entendéis que no me refería a los panes? Guardaos, sí, de la levadura de los fariseos y saduceos.» (Mateo 16, 11)
Entonces comprendieron que no había querido decir que se guardasen de la levadura de los panes, sino de la doctrina de los fariseos y saduceos. (Mateo 16, 12)
Y se le acercaron unos fariseos que, para ponerle a prueba, le dijeron: «¿Puede uno repudiar a su mujer por un motivo cualquiera?» (Mateo 19, 3)
Los sumos sacerdotes y los fariseos, al oír sus parábolas, comprendieron que estaba refiriéndose a ellos. (Mateo 21, 45)
Entonces los fariseos se fueron y celebraron consejo sobre la forma de sorprenderle en alguna palabra. (Mateo 22, 15)
Mas los fariseos, al enterarse de que había tapado la boca a los saduceos, se reunieron en grupo, (Mateo 22, 34)
Estando reunidos los fariseos, les propuso Jesús esta cuestión: (Mateo 22, 41)
y les dijo: «En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos. (Mateo 23, 2)
«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que cerráis a los hombres el Reino de los Cielos! Vosotros ciertamente no entráis; y a los que están entrando no les dejáis entrar. (Mateo 23, 13)
«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y, cuando llega a serlo, le hacéis hijo de condenación el doble que vosotros! (Mateo 23, 15)
«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que pagáis el diezmo de la menta, del aneto y del comino, y descuidáis lo más importante de la Ley: la justicia, la misericordia y la fe! Esto es lo que había que practicar, aunque sin descuidar aquello. (Mateo 23, 23)