1. ¡Ea, vamos! Bendigan al Señor todos los servidores del Señor, los que sirven en la casa del Señor, en los atrios de la casa de nuestro Dios!

2. Alcen sus manos al Santuario por las noches, y bendigan al Señor.

3. Que el Señor desde Sión te bendiga, el que ha hecho los cielos y la tierra.





“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina