Znaleziono 1012 Wyniki dla: tribu de Judá
Yavé tendrá en propiedad a Judá en la tierra santa y será Jerusalén nuevamente su elegida. (Zacarías 2, 16)
Así como antes ustedes, gente de Judá y de Israel, eran una raza maldita para todo el mundo, así también ahora yo los salvaré para que sean felicitados por todos. ¡No se desalienten, pues, y tengan confianza! (Zacarías 8, 13)
así también ahora, cambiando de parecer, he decidido tratar bien a Jerusalén y a la gente de Judá. No teman, pues. (Zacarías 8, 15)
«Los días de ayuno de junio, julio, septiembre y diciembre serán en adelante para la gente de Judá días feriados y de regocijo, con ceremonias bonitas -palabra de Yavé -pero sean sinceros y vivan en paz.» (Zacarías 8, 19)
Sacaré de su boca la carne con sangre, y de sus dientes los alimentos prohibidos. Pero nuestro Dios se dejará para él a algunos filisteos, que formarán como una familia en Judá. Ecrón será tratado como el jebuseo. (Zacarías 9, 7)
Yo estiraré a Judá como un arco y le pondré como flecha a Efraím; lanzaré tus hijos, oh Sión, contra los griegos, y tú serás como la espada de un héroe. (Zacarías 9, 13)
Me he indignado con los pastores y voy a castigar a los chivatos.) PeroYavé de los ejércitos visitará a su rebaño, la tribu de Judá, ellos serán su caballo de batalla. (Zacarías 10, 3)
Reanimaré al pueblo de Judá y liberaré a la gente de José. Los restableceré, pues les he tenido lástima, y serán como si nunca los hubiera rechazado (porque yo, Yavé, su Dios, los he escuchado). (Zacarías 10, 6)
A continuación rompí mi otro bastón llamado Unión; y quedó rota la fraternidad entre Judá e Israel. (Zacarías 11, 14)
Ese día, dice Yavé, sembraré la confusión entre los caballos y volveré locos a sus jinetes. Dejaré ciegos a todos los pueblos y cuidaré de la casa de Juda. (Zacarías 12, 4)
Entonces los jefes de Judá dirán en su interior: «La fuerza de Jerusalén le viene de Yavé, su Dios.» (Zacarías 12, 5)
Aquel día haré que los pueblitos de Judá sean como un fósforo encendido en un montón de leña, como una antorcha lanzada entre las gavillas; devorarán a izquierda y derecha a todos los pueblos de los alrededores. A Jerusalén, empero, no le pasará nada. (Zacarías 12, 6)