Znaleziono 30 Wyniki dla: planes
Antíoco se dirigió a esa ciudad para apoderarse de ella y saquearla, pero no lo consiguió, porque los habitantes de la ciudad, al conocer sus planes, (I Macabeos 6, 3)
Entonces Nicanor comprendió que sus planes habían sido descubiertos y salió a combatir contra Judas cerca de Cafarsalamá. (I Macabeos 7, 31)
y Báquides partió con un gran ejército. Mientras tanto, envió instrucciones secretas a todos sus aliados de Judea para que se apoderaran de Jonatán y de sus amigos, pero aquellos no pudieron hacerlo porque sus planes fueron descubiertos. (I Macabeos 9, 60)
Lucharon contra Báquides y lo derrotaron, dejándolo muy abatido porque sus planes y su campaña habían fracasado. (I Macabeos 9, 68)
El rey Tolomeo se adueñó de las ciudades del litoral hasta Seleucia Marítima. Mientras tanto, maquinaba sus planes contra Alejandro. (I Macabeos 11, 8)
Heliodoro emprendió inmediatamente el viaje, fingiendo que inspeccionaba las ciudades de Celesiria y Fenicia, aunque su intención era cumplir los planes del rey. (II Macabeos 3, 8)
Pero él encontró una ocasión propicia para sus perversos designios, cuando Demetrio lo convocó ante el Consejo, y lo consultó acerca de las actitudes y planes de los judíos. Álcimo respondió: (II Macabeos 14, 5)
Por falta de deliberación, fracasan los planes, con muchos consejeros, se llevan a cabo. (Proverbios 15, 22)
¡Ay de los hijos rebeldes -oráculo del Señor- que hacen planes sin contar conmigo, qu e concluyen pactos contrarios a mi espíritu, añadiendo así un pecado tras otro! (Isaías 30, 1)
sus pies corren hacia el mal, se apresuran para derramar sangre inocente; sus planes son planes perversos, a su paso hay devastación y ruina. (Isaías 59, 7)
Pero tú, Señor, conoces bien sus planes asesinos contra mí. ¡No les perdones su iniquidad, que su pecado no se borre de tu vista! ¡Que tropiecen delante de ti, y en el tiempo de tu ira, obra contra ellos! (Jeremías 18, 23)
Porque yo conozco muy bien los planes que tengo proyectados sobre ustedes -oráculo del Señor-: son planes de prosperidad y no de desgracia, para asegurarles un porvenir y una esperanza. (Jeremías 29, 11)