Encontrados 194 resultados para: buen juicio

  • Yavé, viste la injusticia que me hacían. ¡Defiende tú mi juicio! (Lamentaciones 3, 59)

  • Porque así como no es buen guardián de un melonar un espantapájaros, así son sus dioses de madera, de plata y de oro. (Baruc 6, 69)

  • Sabrán que soy Yavé cuando los muertos se amontonen al lado de los ídolos, cerca de sus altares, en todas las colinas elevadas, bajo cualquier árbol verde y bajo cualquier frondosa encina, doquiera hayan ofrecido a sus porquerías el buen olor del incienso. (Ezequiel 6, 13)

  • Anda y toma lo mejor del rebaño, pon leña bajo la olla y hazla hervir un buen rato hasta que se hayan cocido los huesos". (Ezequiel 24, 5)

  • Se acerca ese día, la hora de Yavé, el juicio de las naciones. (Ezequiel 30, 3)

  • Sí, haré que ramoneen en un buen potrero, en las altas montañas de Israel, descansarán en un buen corral y se alimentarán en fértiles praderas de las montañas de Israel; (Ezequiel 34, 14)

  • ¿Así que no les basta con pastar en un buen potrero? ¿Por qué han pisoteado el resto del pasto? Si toman un agua clara, ¿por qué han enturbiado el resto con sus pies? ¿Acaso mis ovejas tienen que ramonear lo que ustedes pisotearon y tomar lo que enturbiaron los pies de ustedes? Por eso, esto dice Yavé: Juzgaré tanto a las ovejas gordas como a las flacas. (Ezequiel 34, 18)

  • Estos debían ser sin ningún defecto; debían tener buena presencia y ser de buen juicio, bien instruidos y bien educados. Permanecerían en el palacio del rey, donde se les enseñaría la lengua y la escritura de los caldeos. (Daniel 1, 4)

  • Pero llegará el juicio y se le quitará su imperio; será destruido, borrado totalmente. (Daniel 7, 26)

  • Entonces se volverá contra las islas y se apoderará de buen número de ellas; pero un jefe le atajará y le humillará sin que él pueda vengarse. (Daniel 11, 18)

  • Efraím es como una paloma tonta y sin juicio, pues o bien llaman a Egipto, o bien parten a Asiria. (Oseas 7, 11)

  • Pues yo sé que son muchos sus crímenes y enormes sus pecados, opresores de la gente buena, que exigen dinero anticipado y hacen perder su juicio al pobre en los tribunales. (Amós 5, 12)


“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina