Encontrados 134 resultados para: lista de descendientes de Noé
No trabajarán inútilmente ni tendrán hijos para perderlos, pues ellos y sus descendientes serán una raza bendita de Yavé. (Isaías 65, 23)
Por esto, el león de la selva los ataca, el lobo de las estepas los destroza y la pantera está acechando a la puerta de sus ciudades, lista para despedazar al que salga, porque son muchos sus pecados y numerosas sus rebeldías. (Jeremías 5, 6)
en ese caso ¡tampoco me preocuparé de la familia de Jacob y de David, mi servidor, ni tomaré más de entre sus descendientes a quienes gobiernen la posteridad de Abraham, de Isaac y de Jacob; pues quiero que vuelvan de su cautiverio y demostrarles así compasión. (Jeremías 33, 26)
por eso -lo dice Yavé de los Ejércitos, Dios de Israel: Jonadab, hijo de Recab, siempre tendrá descendientes para servirme.» (Jeremías 35, 19)
No dejan a sus descendientes sino mentira y oprobio. (Baruc 6, 47)
Entonces darás a los sacerdotes levitas que son descendientes de Sadoc y que se acercan a mí para servirme, palabra de Yavé, un novillo para la expiación. (Ezequiel 43, 19)
Pero quienes se acerquen a mí para servirme y estén ante mí para presentarme la grasa y la sangre serán los sacerdotes levitas descendientes de Sadoc -palabra de Yavé- porque mantuvieron las leyes de mi santuario cuando los Israelitas se apartaban lejos de mí. (Ezequiel 44, 15)
Ese territorio será para los sacerdotes consagrados, esos descendientes de Sadoc que aseguraron mi servicio y no siguieron a los israelitas en su desvarío como lo hicieron los levitas. (Ezequiel 48, 11)
Apenas se haya afirmado su reino, será destrozado y repartido a los cuatro vientos del cielo, aunque no entre sus descendientes. No será el mismo poderío que él había establecido, sino que su reino le será arrancado y pasará a otros (Daniel 11, 4)
Dejen que hablen, y que juren en falso, y que celebren convenios, pues su sentencia está lista para florecer, como hace la hierba mala entre los surcos de los sembrados. (Oseas 10, 4)
Dispondré el ánimo de los descendientes de David y de los habitantes de Jerusalén para que vuelvan a mí con amor y confianza. Llorarán por aquel que ha sido traspasado, como se siente la muerte de un hijo único, y lo echarán de menos como se lamenta el fallecimiento del primer hijo. (Zacarías 12, 10)
En aquel día habrá una fuente siempre corriendo para que los descendientes de David y los habitantes de Jerusalén se puedan lavar de sus pecados e impurezas. (Zacarías 13, 1)