Encontrados 412 resultados para: poder

  • Ahora me alegro de poder sufrir por ustedes, y completo en mi carne lo que falta a los padecimientos de Cristo, para bien de su Cuerpo, que es la Iglesia. (Colosenses 1, 24)

  • En el bautismo, ustedes fueron sepultados con él, y con él resucitaron, por la fe en el poder de Dios que lo resucitó de entre los muertos. (Colosenses 2, 12)

  • Porque la Buena Noticia que les hemos anunciado llegó hasta ustedes, no solamente con palabras, sino acompañada de poder, de la acción del Espíritu Santo y de toda clase de dones. Ya saben cómo procedimos cuando estuvimos allí al servicio de ustedes. (I Tesalonicenses 1, 5)

  • En cambio, a ustedes, los que sufren, les dará el descanso junto con nosotros, cuando se manifieste el Señor Jesús, que vendrá desde el cielo, con los ángeles de su poder, (II Tesalonicenses 1, 7)

  • Estos sufrirán como castigo la perdición eterna, alejados de la presencia del Señor y de la gloria de su poder, (II Tesalonicenses 1, 9)

  • Pensando en esto, rogamos constantemente por ustedes a fin de que Dios los haga dignos de su llamado, y lleve a término en ustedes, con su poder, todo buen propósito y toda acción inspirada en la fe. (II Tesalonicenses 1, 11)

  • La venida del Impío será provocada por la acción de Satanás y estará acompañada de toda clase de demostraciones de poder, de signos y falsos milagros, (II Tesalonicenses 2, 9)

  • Por eso, Dios les envía un poder engañoso que les hace creer en la mentira, (II Tesalonicenses 2, 11)

  • el único que posee la inmortalidad y habita en una luz inaccesible, a quien ningún hombre vio ni puede ver. ¡A él sea el honor y el poder para siempre! Amén. (I Timoteo 6, 16)

  • El que está bajo las armas no se mezcla en los asuntos de la vida civil, para poder cumplir las órdenes de aquel que lo enroló. (II Timoteo 2, 4)

  • se constituye, no según la disposición de una ley meramente humana, sino según el poder de una vida indestructible. (Hebreos 7, 16)

  • También la estéril Sara, por la fe, recibió el poder de concebir, a pesar de su edad avanzada, porque juzgó digno de fe al que se lo prometía. (Hebreos 11, 11)


“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina