Encontrados 47 resultados para: talentos
y que una parte pertenecía a Hircano, hijo de Tobías, que era un personaje de posición muy elevada. Contrariamente a la calumniosa denuncia de Simón, el total ascendía a cuatrocientos talentos de plata y doscientos de oro. (II Macabeos 3, 11)
prometiendo al rey en una entrevista trescientos sesenta talentos de plata, y ochenta de otras rentas. (II Macabeos 4, 8)
Se comprometió, además, por escrito a pagar otros ciento cincuenta talentos, si se le concedía la facultad de instalar por su propia cuenta un gimnasio y un ateneo juvenil y de inscribir en un registro a los antioquenos residentes en Jerusalén. (II Macabeos 4, 9)
Pero Menelao, una vez presentado ante el rey, lo impresionó con su aire majestuoso y logró hacerse investir del sumo sacerdocio, ofreciéndole trescientos talentos de plata más que Jasón. (II Macabeos 4, 24)
Antíoco, después de haber sacado del Templo mil ochocientos talentos, partió en seguida para Antioquía, creyendo presuntuosamente que era capaz de navegar por la tierra y caminar por el mar: tal era la arrogancia de su corazón. (II Macabeos 5, 21)
Nicanor calculaba que, con la venta de los judíos prisioneros, podría pagar el tributo del rey a los romanos, que ascendía a dos mil talentos. (II Macabeos 8, 10)
Comenzada la tarea, le presentaron a uno que debía diez mil talentos. (Mateo 18, 24)
A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, (Mateo 25, 15)
el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. (Mateo 25, 16)
El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. "Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado". (Mateo 25, 20)
Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: "Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado". (Mateo 25, 22)