Encontrados 257 resultados para: vender a José/page/9/page/5/page/5/page/2/page/5
Y lo llamó José, porque dijo: "Que el Señor me conceda un hijo más". (Génesis 30, 24)
Después que Raquel dio a luz a José, Jacob dijo a Labán: "Déjame volver a mi casa y a mi país. (Génesis 30, 25)
Puso al frente a las esclavas con sus niños, luego a Lía y a sus hijos, y por último a Raquel y a José. (Génesis 33, 2)
Inmediatamente vino Lía con sus hijos, y también se postraron. Por último se adelantaron José y Raquel, e hicieron lo mismo. (Génesis 33, 7)
Los hijos de Raquel fueron José y Benjamín. (Génesis 35, 24)
Esta es la historia de Jacob. José tenía diecisiete años, y apacentaba el rebaño, ayudando a sus hermanos, los hijos de Bilhá y Zilpá, las mujeres de su padre. En cierta ocasión, refirió a Jacob lo mal que se hablaba de ellos. (Génesis 37, 2)
Israel amaba a José más que a ningún otro de sus hijos, porque era el hijo de su vejez, y le mandó hacer una túnica de mangas largas. (Génesis 37, 3)
Una vez, José tuvo un sueño y lo contó a sus hermanos. (Génesis 37, 5)
Entonces Israel dijo a José: "Tus hermanos están con el rebaño en Siquém. Quiero que vayas a verlos". "Está bien", respondió él. (Génesis 37, 13)
Su padre añadió: "Ve a ver cómo les va a tus hermanos y al rebaño, y tráeme noticias". Y lo envió desde el valle de Hebrón. Cuando José llegó a Siquém, (Génesis 37, 14)
"Se han ido de aquí, repuso el hombre, porque les oí decir: ‘Vamos a Dotán’". José fue entonces en busca de sus hermanos, y los encontró en Dotán. (Génesis 37, 17)
Apenas José llegó al lugar donde estaban sus hermanos, estos lo despojaron de su túnica -la túnica de mangas largas que llevaba puesta-, (Génesis 37, 23)