Encontrados 16 resultados para: Providencia Divina

  • Todo Israel oyó el juicio que hizo el rey y reverenciaron al rey, pues vieron que había en él una sabiduría divina para hacer justicia. (I Reyes 3, 28)

  • Salmo. De Asaf. Dios se levanta en la asamblea divina, en medio de los dioses juzga: (Salmos 82, 1)

  • «Si tienes algún enemigo conspirador contra el Estado, mándalo allá y te volverá molido a azotes, si es que salva su vida, porque te aseguro que rodea a aquel Lugar una fuerza divina. (II Macabeos 3, 38)

  • los cobardes y desconfiados de la justicia divina, comenzaron a escaparse y alejarse del lugar; (II Macabeos 8, 13)

  • y es tu Providencia, Padre, quien la guía, pues también en el mar abriste un camino, una ruta segura a través de las olas, (Sabiduría 14, 3)

  • Imaginaban los impíos que podrían oprimir a una nación santa; y se encontraron prisioneros de tinieblas, en larga noche trabados, recluidos en sus casas, desterrados de la Providencia eterna. (Sabiduría 17, 2)

  • Los santos hijos de los buenos ofrecieron sacrificios en secreto y establecieron unánimes esta ley divina: que los santos correrían en común las mismas aventuras y riesgos; y, previamente, cantaron ya los himnos de los Padres. (Sabiduría 18, 9)

  • Citado Pablo, Tértulo dio principio a la acusación diciendo: «Gracias a ti gozamos de mucha paz y las mejoras realizadas por tu providencia en beneficio de esta nación, (Hechos 24, 2)

  • Los nativos, cuando vieron el animal colgado de su mano, se dijeron unos a otros: «Este hombre es seguramente un asesino; ha escapado del mar, pero la justicia divina no le deja vivir.» (Hechos 28, 4)

  • Por el contrario, ante la promesa divina, no cedió a la duda con incredulidad; más bien, fortalecido en su fe, dio gloria a Dios, (Romanos 4, 20)

  • ahora bien, antes de haber nacido, y cuando no habian hecho ni bien ni mal - para que se mantuviese la libertad de la elección divina, (Romanos 9, 11)

  • De hecho, como el mundo mediante su propia sabiduría no conoció a Dios en su divina sabiduría, quiso Dios salvar a los creyentes mediante la necedad de la predicación. (I Corintios 1, 21)


“Seja perseverante nas orações e nas santas leituras.” São Padre Pio de Pietrelcina