Encontrados 139 resultados para: escucha
Yahveh me dijo: Hijo de hombre, presta atención, mira bien y escucha con cuidado lo que te voy a decir acerca de todas las disposiciones de la Casa de Yahveh y de todas sus leyes. Te fijarás bien en lo que respecta a la admisión en la Casa y a la exclusión del santuario. (Ezequiel 44, 5)
Y ahora, oh Dios nuestro, escucha la oración de tu siervo y sus súplicas. Ilumine tu rostro tu santuario desolado, ¡por ti mismo, Señor! (Daniel 9, 17)
Inclina, Dios mío, tu oído y escucha. Abre tus ojos y mira nuestras ruinas y la ciudad sobre la cual se invoca tu nombre. No, no nos apoyamos en nuestras obras justas para derramar ante ti nuestras súplicas, sino en tus grandes misericordias. (Daniel 9, 18)
¡Señor, escucha! ¡Señor, perdona! ¡Señor, atiende y obra! ¡No tardes más, por ti mismo, Dios mío, pues tu nombre se invoca sobre tu ciudad y sobre tu pueblo.» (Daniel 9, 19)
Y ahora escucha tú la palabra de Yahveh. Tú dices: "No profetices contra Israel, no vaticines contra la casa de Isaac." (Amós 7, 16)
Escucha, pues, Josué, sumo sacerdote, tú y tus compañeros que se sientan en tu presencia - pues son hombres de presagio -: He aquí que yo voy a traer a mi siervo «Germen». (Zacarías 3, 8)
«Si tu hermano llega a pecar, vete y repréndele, a solas tú con él. Si te escucha, habrás ganado a tu hermano. (Mateo 18, 15)
Si no te escucha, toma todavía contigo uno o dos, para que todo asunto quede zanjado por la palabra de dos o tres testigos. (Mateo 18, 16)
Jesús le contestó: «El primero es: Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor, (Marcos 12, 29)
«Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha; y quien a vosotros os rechaza, a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado.» (Lucas 10, 16)
En verdad, en verdad os digo: el que escucha mi Palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna y no incurre en juicio, sino que ha pasado de la muerte a la vida. (Juan 5, 24)
Está escrito en los profetas: Serán todos enseñados por Dios. Todo el que escucha al Padre y aprende, viene a mí. (Juan 6, 45)