Encontrados 192 resultados para: vasos de honor

  • Pues, igual que un cinturón se ajusta a la cintura del hombre, así había hecho yo que se ajustara a mí toda la casa de Israel y la casa de Judá, dice el Señor, para que fuese mi pueblo, mi honra, mi gloria y mi honor; ¡pero no me han escuchado!". (Jeremías 13, 11)

  • Si nuestras iniquidades dan testimonio contra nosotros, actúa, Señor, por el honor de tu nombre. Sí, nuestras rebeldías han sido numerosas, hemos pecado contra ti. (Jeremías 14, 7)

  • Han construido lugares de culto a Baal para quemar a sus propios hijos en su honor, cosa que yo no había prescrito ni ordenado, ni se me había ocurrido jamás. (Jeremías 19, 5)

  • De suerte que las casas de Jerusalén y las de los reyes de Judá serán inmundas como el lugar de Tofet: todas estas casas sobre cuyas terrazas han ofrecido incienso a toda la milicia del cielo y han derramado ofrendas de vino en honor de dioses extranjeros". (Jeremías 19, 13)

  • morirás en paz; y así como se quemaron perfumes en honor de tus antepasados, los reyes que te han precedido, así también en tu honor se quemarán y se hará esta lamentación por ti: "¡Ay, Señor!". Soy yo quien te lo anuncio -dice el Señor-. (Jeremías 34, 5)

  • Los hijos de Sión, preciosos, estimados como el oro fino, ¡ay, son tratados como vasos de arcilla, obra de manos de alfarero! (Lamentaciones 4, 2)

  • Escucha, Señor, nuestra oración y nuestra súplica, líbranos por tu honor y haz que ganemos el favor de los que nos deportaron, (Baruc 2, 14)

  • Salieron de ti marchando a pie, llevados por los enemigos, pero el Señor te los devuelve traídos con honor, como en un trono real. (Baruc 5, 6)

  • Así todo lo que se hace en honor de ellos es embuste. ¿Cómo, pues, se puede pensar o decir que son dioses? (Baruc 6, 44)

  • que degollaste también a mis hijos y los ofreciste en su honor, quemándolos en el fuego? (Ezequiel 16, 21)

  • Pero cambié de propósito en honor a mi nombre, para que no fuese vilipendiado a los ojos de las gentes entre las que ellos se encontraban, porque había prometido sacar a mi pueblo de Egipto ante los ojos de sus habitantes. (Ezequiel 20, 9)

  • Sin embargo, cambié otra vez de propósito en honor a mi nombre para que no fuese vilipendiado ante las gentes, en cuya presencia los había hecho salir. (Ezequiel 20, 14)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina