Encontrados 250 resultados para: historia de Abraham

  • Él respondió: «Hermanos y padres, escuchen: El Dios de la gloria se apareció a nuestro padre Abraham, cuando aún estaba en la Mesopotamia, antes de establecerse en Jarán, (Hechos 7, 2)

  • Abraham salió de Caldea para establecerse en Jarán. Después de la muerte de su padre, Dios le ordenó que se trasladara a este país, donde ustedes ahora están viviendo. (Hechos 7, 4)

  • Le dio luego la alianza sellada con la circuncisióny así Abraham, cuando nació su hijo Isaac, lo circuncidó al octavo día; Isaac hizo lo mismo con Jacob, y Jacob con los doce patriarcas. (Hechos 7, 8)

  • Sus restos fueron trasladadosa Siquém y sepultados en la tumba que Abraham había compradopor una suma de dinero a los hijos de Emor, que habitaban en Siquém. (Hechos 7, 16)

  • Al acercarse el tiempo en que debía cumplirse la promesa que Dios había hecho a Abraham, el pueblo creció y se multiplicóen Egipto, (Hechos 7, 17)

  • "Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob".Moisés, atemorizado, no se atrevía a mirar. (Hechos 7, 32)

  • Hermanos, este mensaje de salvación está dirigido a ustedes: los descendientes de Abraham y los que temen a Dios. (Hechos 13, 26)

  • ¿Y qué diremos de Abraham, nuestro padre según la carne? (Romanos 4, 1)

  • Porque, ¿qué dice la Escritura?: Abraham creyó en Dios y esto le fue tenido en cuenta para su justificación. (Romanos 4, 3)

  • Pero esta felicidad, ¿es únicamente para los que han sido circuncidados, o también para los que no lo han sido? Consideremos lo que ya dijimos: A Abraham le fue tenida en cuenta la fe para su justificación. (Romanos 4, 9)

  • Y es también padre de los que se circuncidan pero no se contentan con esto, sino que siguen el mismo camino de la fe que tuvo nuestro padre Abraham, antes de ser circuncidado. (Romanos 4, 12)

  • En efecto, la promesa de recibir el mundo en herencia, hecha a Abraham y a su posteridad, no le fue concedida en virtud de la Ley, sino por la justicia que procede de la fe. (Romanos 4, 13)


“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina